Es tan hermoso cuando tu tienes a una persona quien te ama por quien eres.
No por lo que tienes.
No por tus títulos o logros.
Ni por tu hermosura ni belleza
Pero en verdad de quien eres.
Que se enamoran de ti por tus
peculiaridades, idiosincrasias y extraños hábitos.
Quien te quieres a pesar de tus fallas, inseguridades, debilidades y tu pasado.
Que están cautivados por tu autenticidad, por los aspectos crudos e inéditos de tu vida. reconocen la belleza única en tu imperfección que resuena profundamente en su alma.
Y es mucho más hermoso cuando pueden tener a quien quiera en el mundo, pero todavía te eligen a ti.
Que te traten como el mejor persona y te hacen sentir el único en el universo.
Que su sonrisa es la cosa más hermoso que jamás hayas visto en toda la Creación. Es como si miraras al sol y aun así quisieras arriesgarte a quedar ciego. esperando que algún día sea la razón por esa sonrisa.
Eso es el amor de Dios. Aun siendo Dios de toda Creación. Te trato como Su único hijo. Te ama tanto hacia el precio de la cruz.